Un Día De Felicidad Y Alegría
En lo que escribo esta nota las lágrimas caen de mis ojos por la felicidad de saber que podré ser maestro y que miles de estudiantes indocumentados podrán ejercer sus profesiones. La idea que seré maestro de matemáticas y que enseñaré a los estudiantes más que números, porque les voy a enseñar valores como respeto, liderazgo, e integridad con el fin de que sean mujeres y hombres de valor para nuestra sociedad, ha hecho de este día el más feliz de mi vida.
El presidente Obama ha puesto un alto a las deportaciones de los estudiantes indocumentados conocidos como los Soñadores, los DREAMers, siempre que cumplan ciertos requisitos. Los requisitos son graduarse de la escuela secundaria en Estados Unidos, tener buen carácter moral, haber entrado al país antes de los 16 años y ser menor de 30 años. Gracias a Dios yo lleno todos los requisitos y podré usar mi educación para mejorar mi comunidad y contribuir a la economía del país.
La felicidad de saber que podré usar la educación que Texas A&M University me ha dado, me llenó de felicidad. En la mañana llamé a mi madre para darle las buenas noticias y ella llorando oró y agradeció a Dios por el Presidente Obama y su decisión. Como estudiante indocumentado ha sido difícil poder servir a mi comunidad como maestro, pero no fue un impedimento para ser voluntario en escuelas locales como tutor. Ahora el saber que podré trabajar como maestro y poder dar clases a mis estudiantes me llena de alegría porque ser maestro ha sido mi pasión por muchos años. Mi deseo de dar clases me ha llevado a ser un estudiante de maestría en Educación en Texas A&M.
A estudiantes alrededor del país se les había negado el derecho de servir a la comunidad, pero hoy es un día donde podremos usar nuestros talentos para mejorar la economía de Estados Unidos. Hemos sufrido mucho porque se nos negaba servir a nuestra patria. Estudiantes alrededor del país se regocijan este día sabiendo que hemos alcanzado un gran logro en la historia de Estados Unidos. Es importante saber que ésta no es la meta final y que todavía queda mucho trabajo por hacer.
Tenemos que luchar por los derechos de nuestras comunidades y familias inmigrantes y pasar una reforma migratoria. Los Soñadores han luchado con vehemencia aún con la falta de documentación, y ahora que tenemos la oportunidad de trabajar me da esperanza al simplemente imaginarme lo mucho que lograremos siendo documentados.
Ahora esta oportunidad se nos ha dado y tenemos que tomar ventaja de ella al educarnos, graduarnos de la escuela y seguir los estudios a un nivel universitario. Gracias a todos los que han apoyado esta causa hoy es un día de felicidad y alegría ya que las cadenas que nos impedían servir han sido rotas, y ahora podemos servir a nuestra Nación y hogar.
José Luis Zelaya, quien fue traido a los EE.UU. por su madre desde Honduras cuando tenía 14 años de edad, acaba de terminar su primer semestre como estudiante de posgrado de Texas A & M, con un promedio de 4.0. NewsTaco escribió acerca de Zelaya cuando se postuló para presidente del cuerpo estudiantil de Texas A & M University.